- 350 gr. de Harina Panadera Integral*
- 520 gr. de Harina Panadera Blanca*
- 8 gr. de Levadura seca de panadería
- 550 gr. de agua tibia
- 40 gr. de mantequilla derretida
- 12 gr. de sal
- 2 cucharadas de sirope de arce, en sustitución del azúcar (esto es opcional)
- 130 gr. de nueces troceadas
- 100 gr. de pasas sin pepitas
*En los dos casos la harina debe ser de media fuerza, para ello me he guiado mirando la cantidad de proteína por cada 100gr. que figura en el paquete, en este caso debe tener entre 10 y 11 gramos, para cumplir este requisito.
Preparación:
En primer lugar mezclamos en un bol, ambas harinas con el agua y lo dejamos reposar 20 minutos aproximadamente.
Transcurrido ese tiempo, añadimos la sal, la levadura de panadería, el sirope de arce y las nueces troceadas, amasamos bien con amasadora o de forma manual, yo en mi caso lo he hecho con mi compinche la KA, con el accesorio gancho, amasamos 2 minutos y descansamos 10, así hasta tres veces, después añadimos la mantequilla derretida y amasamos de nuevo hasta que se haya integrado por completo en la masa.
Cuando este lista, hacemos una bola con la masa y la ponemos en un bol que habremos engrasado previamente, y lo tapamos con film o con un paño. Dejamos que leve y doble su tamaño, en mi caso han sido un par de horas aproximadamente, después lo metemos al frigorífico a dormir toda la noche.
Al día siguiente, sacamos la masa, dejamos que se temple un poco y sobre una superficie enharinada, la aplastamos para quitarle aire. Después con un rodillo alisamos, dándole una forma de rectángulo, disponemos las pasas en la mitad de nuestro rectángulo y doblamos desde el centro hacia el otro lado para cerrarlo, repetimos un par de veces o hasta que hayamos incorporado todas las pasas.
Formamos un cilindro, que tenga una longitud acorde con nuestro molde (no olvidéis engrasarlo previamente) y metemos dentro nuestra masa. (Un inciso: Con estas cantidades, podía haber hecho dos panes, pero ansiosa de ver el resultado, hice solo uno que ha salido bastante grande y alto). Tapamos el molde con film o un paño y lo dejamos levar otro rato, una hora aproximadamente.
Finalmente, cuando nuestra masa haya crecido, la metemos al horno precalentado 250ºC, 20 minutos, después lo bajamos a 190ºC otros 20 minutos y listo. Tendréis un pan recién hecho y un olorcito en la cocina…mmmmm!!!
Os diré que mi pan siguió levando durante un rato en el horno, tanto que pensé que saldría con forma de Alien, después cuando lo saqué estaba muy duro, y pensé que algo había salido mal, pero todo lo contrario según se va enfriando va tomando otra textura.
Una vez fuera del horno, debe enfriar del todo, sobre rejilla, antes de cortarlo. No seáis ansiosos!!!!
Después, ya sabes lo que va…jejeje!!!! Espero que os animeis a probar esta experiencia, puede parecer un proceso laborioso, pero el resultado es un pan tierno, que junto con las nueces y las pasas harán que vuestro desayuno o merienda sea una delicia!!! No digo más…
Para terminar os dejo como siempre la anécdota de Valentina:
Un domingo que estábamos comiendo en casa de mis padres, mi madre había preparado albóndigas, y las prepara con una salsa de tomate, cebolla y zanahoria, entonces mi padre le dijo a Valentina, hija come zanahoria, a esto Valentina le dice: No, las zanahorias son para los conejos!!! Madre mía nos dejó de una pieza a todos!!!!
Como siempre, agradeceros que hayáis dedicado un ratito a leerme, me hace muchísima ilusión que me dejéis algún comentario, y si queréis preguntarme cualquier cosa, yo estaré encantada en responderos por aquí o través de las redes sociales si decidís seguirme…¡¡¡Hasta pronto!!!
¡¡¡Dulces Postres!!!
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